viernes, 21 de abril de 2017

Poemas prestados #115

Muchas gracias a todos los que nos han enviado sus poemas con las palabras prestadas por Sonia Betancort. Te animamos a que sigas participando en la centésima dieciséis edición que empieza el viernes 21 de abril del año 2017.

Premio al mejor poema seleccionado por la editorial Cuadernos del Vigía. Enhorabuena a Lola Deán Guelbenzu quién recibirá el libro La sonrisa de Audrey Hepburn, firmado por la autora Sonia Betancort, de la editorial Vaso Roto




A continuación publicamos los poemas escritos a partir de las palabras prestadas:
aceituna, estuario, inocencia, estrella y página.


❆ ❆ ❆



Desde el Olivo

escapan aceitunas
verdes
           en esperanzas,
negras
           de noche o luna.

Que son tus ojos niña
clara inocencia
como dos lucecitas
de Cielo
           Tierra.

Cerquita del estuario
cuando anochezca...
contaremos un sueño
con cada estrella.

Será como ese cuento
hilado en un poema
de páginas escritas,
cintas de seda
en colores de mar,
           Tu y Yo
                      Sirenas.


Lola Deán Guelbenzu
Majadahonda, Madrid, España


❆ ❆ ❆



Nervios, cultura y arte

La conciencia nerviosa
La aceituna verde y jugosa
Del dolor y los gustos
Del ciclista y sus puertos

Cultura social de mercenario
Seguridad del estuario
Con rechazo y sin inclusión
Con inocencia y sin pasión

Cien artísticos desatinos
Mil páginas y el Destino
Las almas y sus versos
Las estrellas y sus universos


Julio Alcalá
Castellón, España

Julio’s Blog


❆ ❆ ❆



Abaten a tiros a un campesino
no Centroamérica, sino en Sierra Morena,
mientras recoge la aceituna,
no en 2011, sino en 2040.
No era su propiedad, remarcan los idólatras,
no dicen que lo hacía por el bien colectivo,
mientras jornadas alternaba para poder
pagarse el vestuario de la obra de teatro.
En escena La Ópera de los Tres Centavos1.

Hubo un tiempo en el que creía2 en la inocencia
del Sistema interestelar, al igual que tú,
pero ya me he bajado del caballo, para que
voy a seguir creyendo en éste, si cada
noche cuando se apagan las luces, me subo
en lo alto de la colina con el objetivo de
ver mí Estrella, pero ésta ya no está, quizás
nunca estuvo, yo siempre pensé en ella,
como no pensar en ella, esa luz remarcada y puntiaguda
que te ilumina en los tiempos más atroces.

Estoy escribiendo un reportaje sobre los meneos sociales,
y me queda una última página,
la noticia del campesino me duele, pero …
y mí Estrella, quién escribirá por ella, sino lo hago yo.

Pude hacer un epopeya de ella, pero…
le resta verosimilitud, mejor una crónica.

Dice así: Hayan una estrella roja y calurosa,
en el centro de los corazones, a diferencia
de las amarillas, ésta no se puede observar,
se manifiesta únicamente a través de los actos.


1 Obra de teatro de Bertolt Brecht representada por primera vez 1928
2 Comienzo del poema “La canción del no y el sí” de Bertolt Brecht.




David Sánchez Cruzado
Madrid, España


❆ ❆ ❆



Copa de Vino

La aceituna es
la señal en una
copa de vino
donde un pez
de rio, sigue el mar
en el estuario
donde navega
con la inocencia
que lo convierte en
estrella
sacudiéndose
en sus olas
paginas
de su misterio marino
que lo conduce
a su río
en la espuma
de su copa de vino.


Martha del Pilar
Un Pensamiento


❆ ❆ ❆



TE ESPERO Y VEN


Tú, amor, estuario de mi sangre,
rosa azul de pura melancolía,
¿por qué mueres o vives cada día
sin risa ni luz ni estrella ni hambre?

Con los ojos te escribo esta página
blanca y aceituna, sin alevosía
ni nocturnidad, pues tú tan vacía
eres de mí una flor sin esquina.

Tu inocencia duerme siempre junto a mí,
en esta casa colgada del cielo
que los dos construímos de la nada.

Huir, vida, no es esconderse en ti;
te espero y ven, no tardes más que un duelo:
sin ti soy un samurai sin espada.


Karlos Linazasoro
Tolosa, Gipuzkoa


❆ ❆ ❆



MISIVA III

Huesecillos de peces son espinas de flores
Ni troncos de palmeras ni bambúes tus piernas
¡oh resto de entropía entre uno y otro amanecer!

Relampaguean los circuitos neuronales
Absorto en fibra óptica navegas sin estrella
de silencio en silencio nada se oculta
ningún íntimo sentido tras las cosas
tras el rastro de nuestros sueños pobres

Luego, por el hambre ungidos,
desayunamos una esperanza de media luna

¿Comulgaremos exclusión hasta el ocaso?
¿Plantaremos semillas de crisantemos máximos?
¿O sedientos de fe criaremos futuros
en mundos de inocencia donde guarecernos
en la atónita belleza de una fuga?

¡Abajo
            con la parsimonia de las aceitunas!

Sepas que Lógica es también ficción
y Progreso otro mito en el libro del cosmos
            —¿razonan los estuarios?—

¡Abajo
            con los embustes y los aspavientos!

Si hasta el hierro de la dama
se derrite a la luz de cuatro velas
y al funeral de todas nuestras páginas
                        ¿a quién invitaremos?


Amparo Arróspide
Sotillo de la Adrada, Ávila, España


❆ ❆ ❆



NUESTROS ACTOS

Acontece,
relámpago repliega,
mismo frío,
estuario donde duermen los limos.


Inocencia proclamada
de
la
luz que nos llega,
parpadeo de estrellas muertas.

Allá donde nuestros actos
tejen la página muda
como
el
aceite
que
prende
del
llanto
de
la
aceituna.


Izu
Cercedilla, Madrid, España


❆ ❆ ❆



MELANCOLÍA

Las páginas del calendario
se pusieron amarillas,
se secaron las orillas,
azules, del estuario.

Las estrellas plateadas
de papel, perdieron el brillo,
no trasforman en castillo,
mi calabaza, las hadas.

la abandonó la inocencia,
ha perdido su dulzura,
la carita de la luna.

En su mirada, la ausencia,
tiene un rictus de amargura,
lo mismo que la aceituna.


Carmen Hernández Montalbán
Guadix, Granada, España


❆ ❆ ❆



Recuerdo con emoción
el día que te dejaron
tus padres a mi cuidado
en un periodo de tiempo
corto, pero que alegraron
para siempre nuestras vidas.

Y vi brillar en tus ojos
una mirada tan tierna,
como nunca, reflejada,
declarando tu inocencia.

Estirabas tus manitas
e insistías con ardor
haciendo hermoso mohín
porque no podías lograr,
y pretendías alcanzar,
aún las estrellas atrapar.
Y no lo lograste al fin,
¡pero eras tan feliz!…

Tu piel morena, aceituna
resaltaba en la blancura
de aquella camiseta
que tapaba con mesura
tu pequeño cuerpecito,
ágil y fuerte de niño.

Hoy los años han pasado
tu eres un hombre cabal,
tu familia, tu trabajo
son estuario en tu vida
que te ha llevado a lograr
ver la desembocadura
que conduce a la verdad.

Las estrellas, en el cielo
y en la tierra, pisas fuerte
tus alumnos y tu hijo
aprovechan de esta suerte.

Una página hermosa
se ha quedado grabada
para siempre en mi memoria
y no la podré olvidar
por muchos años que viva
porque, aún sin pretenderlo
me he decidido a escribir,
no en prosa, en poesía
recodando aquel momento.


Hortensia Ayuso Oliva
Torremocha de Jarama, Madrid, España


❆ ❆ ❆



Una ventana espera el gesto de mi mano. La aceituna se me cae, rueda, la pierdo y abro la ventana por fin. Casi de noche ya. Página en espera. La inocencia de la blanquísima pantalla quisiera que le hablase de la paz del estuario, o de la estrella que se adelantó impaciente, de frente, allí mismo, y era bella. Pero hoy me sobran las palabras, o me faltan. Sujeto bien la pantalla, dejo que se asome más que otras veces, miramos las dos ese silencio, su luz, hasta que, mutuamente cómplices, en un instante que hubiéramos preferido más largo, el estuario y la estrella son nuestros. Al cerrar la ventana, la aceituna estaba allí.


Teresa de Paz
Madrid, España


❆ ❆ ❆



Cuanto más lees…


Perdí la inocencia
en esa página
del libro que estudia
a las estrellas,
no sé en verdad
qué será de ellas
si este universo
se colapsa.

Cuanto más lees
más dudas surgen
y este estuario
no llega a mermar
la sed y el hambre
de indagar…

Con una aceituna
te contentas
si eres feliz,
pues ella te alimenta.


Carmen Barrios Rull
Leganés, Madrid, España


❆ ❆ ❆



Levedad

Vamos arrancando páginas cuando seria tan hermoso escribirlas
Garabatos de vidas cruzadas, de estuarios que cobijan harmonías de sal y mareas
Anhelamos que nos guíe la inocencia, pero que sabe ella de guías,
ella fluye hasta que la abandonamos cuando
no vemos la hermosura de las pequeñas cosas,
no podemos entretenernos con una miga de croissant del desayuno un domingo cualquiera
No queremos observar sin prisas una aceituna que sobrevivió al almuerzo de una mañana de julio,
No se nos ocurre darle forma a las nubes
No sabemos encontrar
aquella estrella lejana y singular a la que pusimos nombre
Puede que, tal vez, si recuerdo su nombre,
vuelva a mi la levedad…


Yolanda Carreras
Madrid, España


❆ ❆ ❆



Retrospectiva

En el parque pajaritos
pelean por sus tontunas
revueltos entre las dunas
diminutas, y los gritos
de niñas y muchachitos
que columpian su inconsciencia.
Minimizan la incidencia
padres, madres, aburridos
conversando entretenidos
por su obligada presencia.

Alguna se desgañita
defendiendo la hermosura
de su prole, sin mesura.
Un chiquitajo la imita,
y su remedo la irrita
sin que nadie se dé cuenta.
Sólo una nena, contenta,
ligeramente apartada,
le ríe, regocijada,
la función que representa.

Aún la recuerda presente
tal como estaba ese día,
porque ya la requería,
porque le era diferente.
Desde su banco de enfrente
se ve jugando al balón
con su corto pantalón,
con sus zapatos raídos,
los aires descoloridos…;
y ya con la tentación.

Tentación. Página en blanco.
Crepúsculos de indecencia
disimulan inocencia.
(Nunca voy a ser el Manco…)
Duda, sentado en el banco,
cómo cantar a la bella:
como estuario o centella;
aunque sabe que no hay una
-ojos de miel, aceituna-
con el brillo de su Estrella.


Pedro Bernal
Madrid, España


❆ ❆ ❆



Ética del amador


Las avenidas
son peldaños azules a tu cuerpo.

Las cortinas abiertas
de la única estrella de tu casa
me convocan.

Entro en el verbo,
ese estuario aceituna
donde dos veraneantes
soñarán una página de arena.

A veces son cigüeñas.
A veces palmeras o unicornios,
pero sea en el vuelo o en la estampida
se echa un ancla y las olas
reposan en la grieta
de dos seres unidos.

Así pasa la noche pintada de farolas
que se enjuagan la boca
con las nubes del día.

Detrás de mis pisadas,
tu edificio en penumbras
es una constelación
sin astrolabios.

He aprendido.

La inocencia se salva con la huida.


Marisa Martínez Pérsico
Italia

www.marisamartinezpersico.com


❆ ❆ ❆



un pecho antiguo
hotel sin una estrella
cualquiera
de rango o de cine, la que sea.
estuche de una aceituna
zapatera
destrozada por echar en falta
el frescor de la inocencia
primera
del botón de lino que se marchitó
para volverse papel de una página
entera
sobre la cual se volcó un río de palabras
rumbo al estuario de versos isleños

de la poesía marinera


Aldo Votto
Brasil


❆ ❆ ❆



El amante

Tu lengua,
estuario de mi inocencia,
resaca de un caudal
lleno de impulsos,
hace que broten calendarios
en páginas vírgenes,
con sus días
y sus noches.
Allí constan
todas las lunas furtivas,
todos los cielos rojos,
alguna que otra estrella
y todos los pensamientos.
Pero hoy es hoy,
ahora es ahora
y sigo aquí
y aquí sigo,
tan desnuda y sola,
como el hueso de una aceituna.


Blanca Vicario
Palencia, España

niveusv.blogspot.com


❆ ❆ ❆



Piel de aceituna


Recorrí otra vez
tu astucia encorvada

era indudable…

tenías piel de aceituna
repelías mis intentos
por rozarte,
lisura insondable,

pringabas mis horas cansinas
con tanta inocencia que acaso creyera
que tú siempre eras
la piel de mi estrella

y siempre caía mi ser
derramado
por todo tu estuario
—oscuro presagio—
sorbiendo fluido alocado.

Qué a gusto soñara
por siempre tú fueras
virtud que engalane
las páginas hueras

aquellas que sorben mis lloros
turbando su blanco,
piel de los óleos que
escurren mi tacto
y eluden los roces
que no te voy
dando.


Vicente Javier Fernández Gómez
Añastro, Burgos, España

vicentejavier-f.blogspot.com


❆ ❆ ❆



Contemplo el estuario
de la vida
con inocencia
y, melancolía
mientras río,
creyendo tocar una estrella
que confundo con ella.
No puedo pasar página,
día a día,
todo me recuerda su escultural
figura
y, su piel color aceituna
cuando en ella, brillaba la luna.
Amada mía!


Mariví García Gallego
Madrid, España


❆ ❆ ❆



Los niños
 Juana Betancort

Aprenden a regañadientes a dividir,
los afluentes, la diferencia entre un estuario y un delta
o el listado ordenado de los reyes borbones
pero cuando un libro les interesa, lo beben sin saltarse
ni una página para saber cómo acaba
la historia.

Les adviertes que no se coman todos los berberechos
o las cortezas y aceitunas, por más que les gusten,
cuando hay invitados.

No necesitan saber que las estrellas
son bolas de gas incandescentes
y sus principales riquezas son su crueldad y su inocencia.

Vienen sin libros de instrucciones ni garantía.

Todos intentamos serlo mucho tiempo,
pero ser niños dura muy poco.


Gabriel Merino
Madrid, España


❆ ❆ ❆



Hija

Del hontanar con rugiente bramido,
brioso caudal, en torrente santuario,
galopa audaz, inconsciente el calvario
negro alazán de su mente sin cuido.

Por la cañada se oía el vagido
del silencio susurrante al sicario
para página pasarle en estuario
y colmatar de la cuenca el latido.

La inocencia de su infancia fue estrella
guiadora, modelo…, mas, luego arana
contra toda la familia, botella
de tósigo rebosante, gusana.

Como olivo fértil desde la cuna,
pero no germinó ni una aceituna.


Adolfo García García
Las Palmas de Gran Canaria


❆ ❆ ❆



Inocencia

Esta página escrita
una y otra vez,
pintada de lágrimas
de amor y despecho
coloreadas por tus promesas
infundadas,
que tanto creí.

Siempre me recalcabas,
sobre mi inocencia
y meditaba
si a mi edad,
como no iba a dibujar
en mi corazón,
sueños, creencias.

Si, Soy INOCENTE.

Dejé en pensar
en eso,
que tantos repetías
y comencé a
escribir, escribir, escribir
una hoja tras otra,
corregía y resaltaba
las palabras borroneadas
con mis gotas de esas letras
que no conjugaban
con mis sueños,
y recordé que siempre
comparabas a la vida.
como un estuario,
que lo dulce y salado
iban de la mano.

Hoy llegué
a la playa
que juntos elegimos,
aquí estoy
solo YO,
acompañada de esa estrella
que era nuestra.

Esta hoja y las que siguieron
las dejé caer,
por esas aguas
mezcladas de color
aceituna.

Mi Inocencia
queda
y esa estrella
es toda mía.


Guillermo Fernández Liguori
Buenos Aires, Argentina


❆ ❆ ❆



Bajo la farola estrías tristes
encías grises bajo la capucha.
Páginas manchadas de almizcle
en la época del luto de las aceitunas
reclaman una inocencia marchita,
somos estuarios ante un tiempo que devora.
Sobre la capucha las estrellas
sobre la farola ya no quedan.


Ignacio Delgado Wicke
Madrid, España


❆ ❆ ❆



Tu Olvido

Siempre me vi embriagado de tu inocencia y,
del resultado de aquellos exhaustos besos
que a deshoras llenaban de luz tu mirada de aceituna.
Aunque en la orilla de las cosas es más fácil soñar
mi recuerdo te buscó en el estuario
confluyente de tus dudas donde tu piel,
se difumina irremediablemente poco a poco,
en la desidia de lo que fuimos el uno en el otro,
asesinados por nuestro propio daño.
Como ecos de un sonido inmenso
aparecías en la noche de las cosas.
En mi cabeza el leve martilleo de tu voz y,
en mi ser la desolación y el desconcierto
en mitad de la nada abrigando un deseo.
Fue así como vislumbré luego tu estrella,
en todos los lugares donde te anduve sinuoso.
Ahora, en tu huida a lo lejos, las ganas de tenerte
entre mis brazos se hace cada vez más lejana,
mientras lleno de palabras mudas la doliente página
de este olvido imperfecto de tus manos.


E.Savinien


❆ ❆ ❆



BUSQUEDA


Desembocadura del mar,
Menos conocido, como tal,
Estuario mismo significado,
Pero más formal.
Maldigo su inocencia,
Me detengo tras el.
20 minutos han pasado,
Tras el pensamiento,
Miro aturdido el mar.
Atenea dame el saber,
De repente cae una aceituna,
Más bien una oliva.
La cual me demuestra que mi plegaria ha sido oída.
Me dispongo a ver las estrellas,
Pero la contaminación lumínica me lo impide.
Serendipia, un hallazgo afortunado
Buscaba entre mi vida,
una nueva página en la que escribir.


Israel Jubrias Cordero
Lardero, La Rioja, España


❆ ❆ ❆



Más páginas pasadas
que por leer y sin embargo
hay una inocencia niña
en cada arruga
con la que nos amamos.
El sabor a aceituna de tu sexo
aliña el estuario de mi espalda,
rastros de estrellas y de lobos
me llevan al azarbe de tu boca.
Inocencia del tiempo
no tejido
con la sal de anchoa de tus labios.
Sin la bahía sabia de tus palmas.


Pon
San Isidro, Alicante, España


❆ ❆ ❆



El miedo fue tu camino
para bajar a la vida,
apartar la tierra
y desgarrar todo el aire libre
para oler el trigo de mi risa.

Te soñé,
gladiador y derrotado,
despeñando con tu cuerpo fatigado
la ciega espesura,
abrazando la inocencia de una amapola
con la fuerza perdida.
Te soñé,
dulce y salado,
entre las aguas de los estuarios,
gritándole a la lluvia,
amando su canto.

De nube en nube, te soñé.

Se abrió la pena desnuda,
se abrió un aullido
como el gemido de una estrella.
Y la luz se hizo dócil fruta,
las piedras
jugosas aceitunas;
se cubrieron de polen y abejas
mis páginas.


La tierra te conoce.
Bajo su seda temblorosa,
de beso en beso,
ya recorro su hermosura.


Keka Conesa
Sevilla, España


❆ ❆ ❆



Playa color aceituna
tu espalda bajo mi mano.
Tibio mar el que aguarda
en el estuario
de tu ingle.
Con mis dedos trazo
constelaciones en las estrellas
de tus pecas.
Mi lengua
aún conserva
la inocencia de lo eterno.
Pasamos las páginas de la pasión
con dedos húmedos y exploradores.
Sólo el tiempo agotará
posibles futuros.


Dudu Fdez
Villamuriel de Cerrato, España


❆ ❆ ❆



No hay comentarios:

Publicar un comentario